El que anda de día no tropieza.
“Le dijeron los discípulos: Rabí, ahora procuraban los judíos apedrearte, ¿y otra vez vas allá? Respondió Jesús: ¿No tiene el día doce horas? El que anda de día, no tropieza, porque ve la luz de este mundo; pero el que anda de noche, tropieza, porque no hay luz en él.”
S. Juan 11:8-10 RVR1960
Jesús tenía como premisa fundamental el prever, no se lanzaba asimismo como a la loca, más decidía tomarse la precaución suficiente cuando era necesario, este caso que nos narra el versículo confirma lo dicho. Por lo cual, ante la pregunta hecha por sus discípulos, les comparte esta enseñanza de vida, que parafraseando podríamos decir, peligros, siempre existirán, más cuando caminamos bajo la luz es decir la voluntad del Señor, no hay porque temer a las tinieblas, pues el que camina en ellas, es porque Cristo no está en el y solo tinieblas brotan de su interior.
Ahora bien, este pasaje, es muy conocido, Jesús habría de llegar a resucitar a Lázaro, a tomar por fuerza el reino de la muerte, llamando a la vida, al que estuvo muerto por cuatro días, entonces si discernimos claramente lo que aconteció, comprenderíamos la inmensa conmoción espiritual que creo, un impresionante preámbulo para lo que ocurriría pocos días después con su propia resurrección.
Hoy es un precioso día para meditar en esta realidad, la luz vence a las tinieblas y si caminamos en la luz, no tenemos porque temer.
Oremos pues y recibamos esta enseñanza del Maestro, quien jamás se sale de la voluntad del Padre, por lo cual, sin importar lo grave que sea por lo que estamos atravesando sabemos que estamos bajo la soberanía de Dios y su voluntad, buena, agradable y perfecta, prevalecerá, en el nombre de Jesús amén.
Un muy bendecido jueves
Pastor Diego Ospina