Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe.
“Haced todo sin murmuraciones y contiendas, para que seáis irreprensibles y sencillos, hijos de Dios sin mancha en medio de una generación maligna y perversa, en medio de la cual resplandecéis como luminares en el mundo; asidos de la palabra de vida, para que en el día de Cristo yo pueda gloriarme de que no he corrido en vano, ni en vano he trabajado. Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros. Y asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo.”
Filipenses 2:14-18 RVR1960
El Apóstol Pablo escribe a los Filipenses desde la prisión y lo hace con toda la seguridad puesta en el Señor, sin temores ni angustias, aunque lo que expresa y desde donde escribe, una húmeda y terrorífica prisión en Roma, pondrían a temblar las piernas a cualquiera, más él está fortalecido en Cristo, entregado por completo a la obra y dispuesto a dar su vida por aquel que la dio para redención de la humanidad, por lo cual, como cierra el pasaje de nuestro devocional para hoy, está lleno de gozo, que increíble es.
Solo el pensarlo parece loco, pero no lo es, puesto que ha logrado aferrarse, con todo su ser a la esperanza dada por el Señor y descansar en sus promesas, lo cual puede transformar la más horrenda prisión en un lugar de adoración, ahí se cumple lo que está escrito en los Salmos:
«Has cambiado mi lamento en baile; Desataste mi cilicio, y me ceñiste de alegría.”
Salmos 30:11 RVR1960.
Descansemos pues en Él, depositando nuestra ansiedad por que tiene cuidado de nosotros y llenos de su amor, prediquemos al mundo su verdad, en el nombre de Jesús, amén.
Un muy bendecido jueves.
Pastor Diego Ospina.